📍 Hong Kong – Cuando la fauna protesta
Prohibido alimentar a los animales. O no.
En un parque de Hong Kong, un mono ha hecho historia y, de paso, crítica social. El pasado 16 de junio, fue visto arrancando con furia un cartel que decía “prohibido alimentar a los animales”. No se sabe si lo hizo por hambre, por rebeldía o por puro gusto por el vandalismo, pero lo cierto es que rompió el cartel con una rabia que ni en una tertulia política en prime time.
El cartel quedó hecho trizas y las redes sociales estallaron: que si “protesta animal”, que si “revolución de los simios”, que si “el mono que dijo basta”. En medio de tanto meme, se abre un debate serio: ¿quién pone las normas cuando compartimos espacio con la naturaleza? Aunque bueno, también puede ser que al mono simplemente le pareciera fea la pancarta. O sea, criterio estético no le falta.
🇬🇧 Gales – Cuando la Macarena no es parte del temario
Música: "Macarena Heavy"
Alice Ashton era profesora en Gales… hasta que convirtió su clase en un after. Según el Consejo de la Fuerza Laboral Educativa, la maestra bailó la Macarena bajo los efectos del alcohol en plena aula. No contenta con eso, también soltó algún que otro insulto a los alumnos. Y no, no fue parte de una clase de literatura punk.
La profesora, que además tenía antecedentes por conducir bebida, ha sido expulsada del sistema educativo, aunque podrá pedir su reincorporación en dos años. Quizá con una coreografía nueva y algo más de sobriedad.
Los investigadores revisaron las cámaras de seguridad y confirmaron que aquello no fue una performance artística, sino directamente un desmadre. La buena noticia: al menos no intentó enseñarles a los chavales a bailar el venao.
👜 Wisconsin – Spoiler criminal
Música: “No todo es lo que parece” – Aerolíneas Federales
En Estados Unidos, la ironía ha alcanzado niveles épicos. En Wisconsin, dos hombres fueron detenidos con drogas, armas y dinero... todo escondido en un bolso que llevaba escrito, atención: “Definitivamente no es un bolso lleno de drogas”. A ver, si vas a cometer un delito, al menos no pongas el contenido en la etiqueta.
La policía, que ya buscaba a uno de los ocupantes del coche, recibió ayuda extra del perro policía K9 Chase, que olió el pastel —bueno, el polvo blanco— y dio la señal para el registro. Dentro: cocaína, un arma cargada, dólares, parafernalia... y el bolso más honesto del año.
Moral de la historia: la ironía puede ser divertida, pero no te libra del calabozo. Y por favor, si llevas drogas, no lo pongas en Comic Sans en la mochila.
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